lunes, 17 de febrero de 2020

Los límites del perdón

Resumen del libro

Esta historia es en realidad una anécdota personal del autor, Simon Wiesenthal, judío que vivió el Holocausto. Fue encerrado en un campo de concentración, como muchos otros judíos, pero él tuvo un episodio que le cambió la vida para siempre.

Un día, su grupo se dirigió a su antiguo centro de estudios, ahora un hospital militar. Allí, una enfermera le pidió que le acompañase un segundo. Esta le llevó a una habitación donde había un soldado moribundo, de las SS. Pidió a Simon que lo escuchase, ya que iba a narrar su vida antes de la guerra y las atrocidades que había hecho, ya que se arrepentía enormemente de sus actos. En aquellos momentos, solo ansiaba el perdón. Simon no dijo absolutamente nada durante todo ese rato, y salió de allí sin haberlo perdonado, y planteándose si lo que había hecho estaba bien o no.

Por lo tanto, decidió consultarlo con sus compañeros, quienes apoyaban el que no lo hubiese perdonado, debido al sufrimiento que los nazis estaban provocando a los judíos. Dos años después, todos sus amigos fallecieron. Un día, llegaron más prisioneros, entre ellos, un hombre que se había estado preparando para ser sacerdote en la Iglesia cristiana. Simon decidió debatir este asunto con él, ya que tenía otro punto de vista sobre la situación que sobrellevaba el mundo. Aun así, no consiguió resolver su dilema.

Cuando acabó la Guerra, él seguía vivo, trabajando como investigador de los crímenes cometidos por los nazis. Un día, decidió visitar a la madre del soldado, para conocer más sobre él. Nuestro fallecido amigo, que se llamaba Karl, sí que contaba la verdad cuando contó toda su infancia, y su madre aún tenía un buen recuerdo de él. Por ese motivo, Simon no se atrevió a contarle los crímenes que había cometido Karl durante la Guerra. 

Tras todos estos años, no ha zanjado su duda, así que propone al lector ofrecer su opinión al respecto


Mi opinión

Sinceramente, yo creo que el perdonar a alguien o no depende de si ese alguien está realmente arrepentido de sus actos. Es cierto que muchos eligen ser como son por voluntad propia, porque creen que hacen lo correcto... Pero hay personas que no tienen elección en su vida, y son obligados a hacer monstruosidades. En el caso de Karl, se alistó a las SS porque creía que hacía lo correcto. Pero en su lecho de muerte se dio cuenta de todo el mal que había provocado a otras personas y se sintió culpable por todo, con la esperanza de encontrar la redención en el perdón por parte de un judío. Su arrepentimiento era real. Puede que si no hubiese estado moribundo, no hubiese reconocido la maldad de sus actos, pero fue capaz de hacerlo. Es por eso por lo que pienso que habría merecido la pena perdonarlo. 
Si en cambio siguiese pensando que lo que hacía era lo correcto, y no mostrase ningún signo de arrepentimiento no lo habría perdonado en absoluto.

Opinión de Harry Wu

Harry Wu es un escritor de origen chino que en su juventud fue arrestado durante 19 años, acusado de derechismo, ya que el partido dominante era el comunista. Al igual que Simon, recibió un trato cruel mientras estuvo prisionero, aunque hubo un capataz que fue amable con ellos, ofreciéndoles raciones extra de comida y la posibilidad de pasear bajo el sol para recobrar fuerzas. La camarada que provocó su desgracia no se arrepentía de sus actos, con la excusa de "lo pasado pasado está". Es por esto que piensa que el soldado no merecía el perdón de Simon. 

Mi opinión sobre la mentalidad de Harry Wu al respecto

Como dije anteriormente, el perdón depende del arrepentimiento del que ha actuado mal. La camarada Ma actuó de forma cruel y 23 años más tarde no se arrepentía de lo que había hecho. En esta situación estaría de acuerdo con Wu y no la habría perdonado.


Marta Ruiz Martín                1º BACH B

5 comentarios:

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

No estoy de acuerdo con tu opinión, ya que, como bien has dicho, si Karl no estuviese en su lecho de muerte no se habría planteado el sufrimiento que los judíos estaban viviendo y habría continuado torturando a personas inocentes.
También debo añadir que no tenemos ninguna certeza de que su arrepentimiento fuera real, y, en aún en el caso de que lo fuera, una persona que no ha vivido por sí misma esos malos tratos, no tiene el derecho de perdonar a alguien en nombre de otras personas que sí los han recibido.
Además Simon no estaba con Karl por voluntad propia, sino que se ve obligado a escuchar su historia debido al estado moribundo del nazi, una causa que considero injustificable para tomar una decisión tan importante que implica a toda una raza

Anónimo dijo...

Como bien dices, el soldado recoció todo el mal que había causado y por ello, como has hecho, perdonaría al soldado, por su verdadero arrepentimiento. Si no lo perdono solo habría rencor en mí, un rencor inútil porque sus actos no se pueden arreglar, perdonándolo conseguimos no estancarnos y poder seguir adelante en nuestra historia.

Isabella Enica dijo...

Es verdad que hay mucha maldad en el mundo y que las personas son obligadas a hacer monstruosidades pero, en algún momento se tendrían que dar cuenta de que es algo inhumano todo lo que estaban haciendo. Además de que la gran mayoría de los soldados de la SS ni siquiera se preguntaban el por qué de todos esos maltratos.

Anónimo dijo...

Sinceramente no estoy de acuerdo contigo ya que él ,se arrepintió cuando estaba a punto de morir , para morir sin culpa alguna , si él no hubiera estado en su lecho de muerte , no se hubiera arrepentido , no se lo hubiera ni replanteado.