domingo, 9 de marzo de 2025

Los límites del perdón - Juan José Muñoz García

 El girasol - Los límites del perdón

 

Resumen
Relata la vida de un judío llamado Simon Wiesenthal durante su estancia en un campo de concentración en la época de la Alemania nazi, donde cada día morían cientos de judíos. Allí se encontraba con dos amigos suyos Josek y Arthur, en el campo de concentración obtenían noticias pésimas temporalmente y aunque les llegara una buena para ellos era prácticamente imposible que fuera verdad.

Un día llamaron a unos 50 judíos para hacer trabajos fuera del campo de concentración, específicamente en el Instituto Tecnológico, su antiguo instituto. De camino se pararon en un cruce justo al lado de un cementerio y a Simon le llamó la atención que sobre una tumba se elevaba un girasol, tras reflexionar, pensó que aquel difunto mantenía una conexión con el mundo exterior a través de aquel girasol y que ellos, prisioneros del campo, eran asesinados y menospreciados sin respeto ni piedad. Ya llegado al instituto convertido en un hospital, llamaron a Simon para que fuera a la habitación de un joven, vendado entero menos la nariz y la boca para poder respirar, aquel sujeto era irreconocible. Se trataba de un joven militar alemán que quería hablar personalmente con él, suplicándole el perdón tras los asesinatos cometidos sobre judíos. Karl, el joven militar, se encontraba en estado crítico y tras una larguísima historia le comentó a Simon que no podía morir sin el perdón de un judío, sentía una necesidad por ello para morir tranquilamente. Más tarde Simon habló con sus amigos pero les atormentaba la pregunta de si debería concederle el perdón por los asesinatos a judíos, ellos se negaron a darle el perdón ya que no es sólo a él a quien incumbe el caso sino que hacia la población judía es un menosprecio imperdonable. Más tarde hay un encuentro con la madre de Karl ,quién ya falleció, y ella le vuelve a pedir el perdón que no lo concedió a su hijo.




Opinión de los límites del perdón


Personalmente, el perdón no se debe expresar solo con palabras sino que también con acciones, aunque aquel soldado yo no pudiera hacer nada, los asesinatos llevados a cabo dejan marca y destruyen a familias inocentes solo por el simple hecho de ser judíos. Esas familias que seguramente también fueron torturadas no tienen que dar el perdón ya que no provoca ningún cambio en su vida. Estas seguirán siendo víctimas de los nazis. Aunque el joven soldado no pudiera elegir qué hacer, cada hecho conlleva sus consecuencias por lo que el joven soldado a pesar de ser o no perdonado no tenía otra elección. Considero que en tal delicado caso el perdón es inconcebible.


Opinión de autor: Joseph Telushkin


Este autor se sitúa en diferentes casos hipotéticos como si en algunos de ellos el joven alemán cambiara de actitud y no se sintiera arrepentido por sus crímenes. Pone el caso de tener la oportunidad de sanarse, ¿no cambiaría el soldado herido realmente su perspectiva? Sin la presión de morir y estar sufriendo, quizás Karl no necesitaría un perdón para tener la conciencia tranquila ni tampoco hubiera llegado al pleno arrepentimiento, sino que podría seguir las ideas nazis nuevamente. Karl reclama que él no merece tal castigo de sufrir y se excusa de que los inocentes asesinados no fueron torturados durante tiempo para morir. Lo que expresa un concepto de no tanta empatía con los cientos de casos de masacres causados por sí mismo. Ya este soldado no puede arreglar lo hecho, el daño producido es irreversible y las vidas arrebatadas no volverán.

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