viernes, 17 de marzo de 2023

Limites del perdón. Álvaro Marín

Resumen de LOS LIMITES DEL PERDON


Un hombre que sobrevivió al Holocausto y dedicó gran parte de su vida a buscar justicia para las víctimas de los crímenes de guerra nazis. El libro trata sobre la idea del perdón, si hay límites para él y si es posible perdonar a aquellos que han cometido atrocidades.

Wiesenthal cuenta muchas historias personales en el libro, desde su tiempo en los campos de concentración nazis hasta su lucha por la justicia después de la guerra. Él argumenta que hay ciertos crímenes que son tan terribles que el perdón es imposible y que en esos casos, la justicia es la única solución.

El libro también explora el concepto de la culpa colectiva, que es cuando un grupo de personas se siente responsable de los crímenes cometidos por su país o por otros miembros de su grupo. Wiesenthal cree que es importante que los alemanes asuman la responsabilidad por los crímenes de guerra que cometió su país durante la Segunda Guerra Mundial.

Wiesenthal sostiene que el perdón no es algo que se pueda dar fácilmente, especialmente cuando se trata de crímenes de guerra. Él argumenta que es importante recordar el pasado y aprender de él para evitar que los mismos errores se repitan en el futuro.

En resumen, "Los límites del perdón" es un libro que explora temas difíciles relacionados con la guerra y la violencia extrema. Wiesenthal nos recuerda que es importante recordar el pasado y asumir la responsabilidad por nuestras acciones, para que podamos evitar la repetición de atrocidades similares.


Opinion de el Dalai Lama

 En sus escritos y discursos, el Dalai Lama ha argumentado que el perdón es una parte esencial de la vida espiritual y puede liberarnos de sentimientos negativos como la ira y el resentimiento. Él también ha enfatizado la importancia de la compasión, que es el deseo de aliviar el sufrimiento de los demás. Para el Dalai Lama, el perdón y la compasión son esenciales para crear una sociedad más pacífica y armoniosa.


Opinion personal sobre el libro

Este libro me ha dejado profundamente impactado, ya que ha brindado a mi mente una nueva perspectiva sobre el tema del perdón y la justicia. A través de las historias personales del autor y su profunda reflexión sobre el tema, he llegado a entender mejor la complejidad que existe en perdonar a aquellos que han cometido crímenes atroces.

Wiesenthal cuestiona la idea del perdón ilimitado, argumentando que hay crímenes tan terribles que es imposible perdonarlos y que la justicia es la única solución. Esto me ha llevado a reflexionar sobre la importancia de responsabilizar a los perpetradores de atrocidades y sobre la necesidad de recordar el pasado para asegurarnos de que no se vuelva a repetir en el futuro.

En general, creo que "Los límites del perdón" es un libro muy importante y emotivo, que puede desafiar las creencias y la perspectiva de los lectores sobre el perdón y la justicia. Lo recomiendo encarecidamente a cualquier persona que desee profundizar en estos temas.








domingo, 12 de marzo de 2023

Límites del perdón Noemi

 RESUMEN DEL LIBRO

Este libro titulado “límites del perdón” trata sobre como un judío narra su vida y en las condiciones que se encuentra en el campo de concentración. El judío protagonista que cuenta su historia se llama Simón. Cuando llega al campo de concentración se hace dos amigos con ideologías completamente diferentes, Arthur que es un judío con carácter fuerte y directo y Josek que es un judío muy religioso y tranquilo. Al pasar un tiempo los dividieron en diferentes grupos y Simón cayó en un grupo diferente a sus dos amigos. En el camino de ir al lugar que le tocaba se dio cuenta de un dato que le pareció curioso y era que encima de cada tumba de los alemanes fallecidos había un girasol y eso le causo envidia porque él cuando muriese no iba a tener ningún girasol sino que nadie se daría cuenta de que había muerto. El lugar donde le había tocado ir era el instituto tecnológico donde él estudió que ahora se ha convertido en un hospital de guerra. En el hospital se le acerca una enfermera y le dice que lo acompañe y él la sigue sin ninguna preocupación, llegan a una cámara de la muerte donde había un soldado de la SS herido y con vendas por todos lados y en muy mal estado a punto de morir. Este soldado le ruega que le deje contarle una cosa antes de morir Simón acepta y este le cuenta que se alistó en la SS y las series de crímenes que cometió y de las que tanto se arrepiente, en especial la muerte de una familia de una mujer un hombre y un niño que vió cómo morían quemados junto a cientos de judíos y esto lo artomento por el resto de su vida y le pide un último deseo antes de morir le ruega que le perdone todos los crimenes cometidos en nombre de todos los judíos pero Simón se quedo en silencio y se marchó de la habitación. Cuando llegó al campo de concentración y se reunió de nuevo con sus amigos les cuenta lo ocurrido y Arthur y Josek están de acuerdo con lo que hizo pero él no para de pensar que ese alemán era diferente y estaba totalmente arrepentido. Cuando el soldado murió la enfermera le dio las pertenencias a Simón pero éste las rechazó y días después mueren sus dos amigos. El ejército de los estadounidenses avanza lo que obliga a que se cambie de campo de concentración a uno que está en pésimas condiciones en el que conoce a un monje llamado Bolek y al que le cuenta la historia del soldado herido y dice que debería de perdonarlo que todos merecemos un perdón, tiempo después liberan a todos los judíos del campo de concentración y cada uno se va con sus familias. Un día que Simón estaba tumbado en el campo tomando el sol con su familia vió un girasol y se acordó del soldado y fue en busca de su madre a contarle la historia de su hijo.

OPINIÓN SOBRE (ALAN L. BERGER) 

Alan L.Berger cuenta que las preguntas que nos plantea este libro son insolubles y la gente no llega a concluir la solución definitiva sobre el problema del perdón. Dice que el silencio es el principal rasgo de este cuento. La respuesta que él hubiera dado si hubiera estado en el lugar de Simón era que “no perdones a los que tienen prohibido perdonar”. Y que si lo hubiera perdonado en el nombre de las víctimas hubiera estado mal porque no tiene derecho a perdonar cosas de los demás. 

MI OPINIÓN

En mi opinión si yo estuviera en el lugar de Simón sería difícil la respuesta porque se le ve arrepentido y era bastante joven cuando empezó y fácil de manipular por los mayores. Entonces pienso que él no sabía lo que hacía ni estaba consciente de lo que estaba cometiendo pero igualmente no lo perdonaría en el nombre de las víctimas porque sería fácil perdonarle si ami no me a hecho nada pero en el nombre de todos los judíos lo vería mal así que mi respuesta sería que no que cargue con la consciencia de aquellos crímenes cometidos.

LOS LIMITES DEL PERDON SERGIO ARANDA CANO

 RESÚMEN DE LOS DOS PRIMEROS CAPÍTULOS DEL LIBRO “LOS LÍMITES DEL PERDÓN”


Se relata la vivencia de un judío llamado Simón, arquitecto de profesión, que se encuentra recluido en un campamento de concentración nazi. Allí mantiene una estrecha amistad con unos compañeros, llamados Arthur y Josek. Eran objeto de continuas humillaciones y todos aceptaban su destino final, que era la muerte. Se sentían abandonados por Dios. 

Simón, al igual que sus compañeros judíos, eran obligados a realizar trabajos de diferente tipo. En una ocasión, fue enviado a trabajar en los Ferrocarriles del Este y de camino quedó muy impactado por la imagen de un cementerio, en el que de cada una de las tumbas salía un girasol. Pensó que los muertos estarían recibiendo luz y mensajes y que para él no habría ninguno que trajera luz a su oscuridad cuando muriese.

 Un día, al acabar la jornada laboral lo llevaron al Instituto Tecnológico, lugar con mucho significado para él ya que fue donde había estudiado. Ahora los alemanes lo habían convertido en un hospital improvisado. Cuando llegó allí, una enfermera se acercó a él y le preguntó si era judío. A continuación, lo llevó hasta una habitación donde había un soldado alemán llamado Karl que estaba a punto de morir y quería hacerlo en paz. Para ello pidió a dicha enfermera que le trajera un prisionero judío, complaciendo su último deseo. El herido tenía una carta de su madre entre sus manos y quería confesarse y obtener el perdón de un judío por los malos actos y asesinatos que había realizado en el pasado. Estaba obsesionado en concreto por el hecho de que en una ocasión bombardeó una casa llena de judíos y una familia por desesperación se tiró al vacío muriendo todos sus miembros. No quería que su madre dejara de pensar que era un buen hijo y por eso no quería que supiese lo que hizo. Se encontraba enormemente arrepentido y buscaba el perdón a través de Simón. 

Simón quedó muy sorprendido ante su confesión y no fue capaz de dar respuesta alguna. Cuando llegó, se lo contó a sus compañeros y éstos lo apoyaron en su decisión de no perdonarlo. Cuando vuelve al hospital, la enfermera le comunica que el soldado herido había muerto y que tuvo que prometerle que le entregaría todas sus pertenencias a él, excepto el reloj, que se lo enviaría a su madre. Simón no las aceptó. 

Pasaron años de sufrimiento y muerte, termina la guerra y Simón recibe la libertad. Durante este tiempo no consigue borrar de su memoria el episodio del soldado nazi, el dilema moral de haberlo perdonado o no y decide finalmente ir a ver a la madre del soldado para cumplir la voluntad de éste. Simón quiso que la madre mantuviera la fe en la bondad de su hijo, omitiendo cualquier información del pasado de éste.




CRÍTICA AL AUTOR ABRAHAM JOSHUA HESCHEL


El autor hace una similitud a través de una breve historia del rabino de Brisk que durante el trayecto de viaje en un tren es echado fuera del compartimiento por otro viajante, por no querer jugar a las cartas. Este viajante cuando se entera de que a quién ha ofendido es al famoso rabino de Brisk se acerca en varias ocasiones a perdirle perdón, pero éste se niega a perdonarle porque decía que “él no sabía quién era yo”. El viajante ofendió a un hombre corriente. “Dejemos que el viajero vaya a él y le pida perdón”. Según el rabino, nadie puede perdonar los crímenes que han cometido contra otras personas. Yo no estoy de acuerdo con el autor. Mi opinión es que se debería de perdonar a las personas o personas que hayan cometido crímenes contra uno mismo o contra la humanidad, lo que no significa que estos crímenes se tengan que olvidar. Es más, esos crímenes se tienen que recordar y tener muy presentes para que en un futuro no vuelvan a repetirse. El soldado nazi se arrepintió de sus pecados en el lecho de muerte y Simón aunque se mantuviera en silencio y sintiera miedo, por el simple hecho de escucharlo y comprenderlo lo estaba en cierta forma perdonando. En mi caso personal, perdonaría al soldado, lo haría porque todos somos humanos, todos cometemos errores, todos hemos hecho algo de los que nos arrepentimos y ahí está la clave, en arrepentirse, en reconocer que nos hemos equivocado y hemos caído en el pecado. Y, sobre todo, pedir perdón, aunque no sea aceptado, pero lo dicho, dicho está. Siento realmente que el corazón de ese soldado tenía un gran dolor y no podía irse al otro mundo sin rogar por su perdón, creo de verdad que estaba arrepentido y que todos sus actos los estaba pagando porque recibimos lo que damos y al final siempre pagamos.





















jueves, 9 de marzo de 2023

LÍMITES DEL PERDÓN LAURA SÁNCHEZ

  

RESUMEN

 

     El texto narra las vivencias de Simon Wiesentahl, un arquitecto judío en un campo de concentración alemán, lugar donde los judíos eran sometidos a todo tipo de maltratos y vejaciones durante la Segunda Guerra Mundial.

 

     Simon pertenecía a un grupo formado por su viejo amigo de la juventud Arthur y Josek, persona muy religiosa con la que mantenía conversaciones sobre como un ser divino y bondadoso como Dios había podido crear a hombres buenos y hombres terriblemente malvados como el comandante del campo de concentración Wihaus. A veces se planteaban si Dios los había abandonado o estaba de permiso, como le oyeron decir a una vieja, al ver el horror que se vivía dentro del campo de concentración.

 

     Un día, eligieron a Simon y otras 50 personas para salir a hacer trabajos fuera del campo y al pasar por el cementerio observó que en cada tumba había plantado un girasol, lo que le hizo pensar que los muertos estaban recibiendo luz y mensajes a través de dichos girasoles. Posteriormente, llegaron al Instituto Tecnológico donde Simon había estudiado años atrás, lo que le hizo recordar sus días de estudiante en ese lugar y se acordó como durante el curso existía “el día sin judíos”, día que solía coincidir con la época de exámenes, lo que suponía el fin para algunos estudiantes que no superaban el trimestre y que terminaba con episodios de violencia.

     El instituto había sido convertido en un hospital militar donde había multitud de personas heridas por la guerra. De repente, una enfermera le dijo que la siguiera y pensando que podría ofrecerle algo de comida, no dudo en ir con ella. La enfermera lo guió hasta la oficina del decano donde había una cama y un joven moribundo que quería hablar con él. El hombre era un soldado de la SS, llamado Karl, que había participado en la guerra y que quería confesarle a Simon su participación en la matanza cruel de cientos de judíos entre los que abundaban mujeres, ancianos y niños, algo de lo que estaba tremendamente arrepentido. No podía quitarse de la mente la expresión de esos niños inocentes y buscaba el perdón de la comunidad judía a través de Simon para poder limpiar su conciencia y morir en paz. Simon salió de la habitación sin decir nada y volvió con el grupo para volver al campo de concentración. Al llegar, contó a sus amigos lo que le había pasado.

     Al día siguiente, el grupo de trabajo entre los que estaba Simon volvió al Instituto Tecnológico y la enfermera se acercó a él y le dijo que el soldado había fallecido y que le dejaba sus pertenencias entre las que estaba la dirección de su casa y un reloj. Simon se negó a aceptar nada.

 

     Dos años después, Simon fue trasladado a la prisión de Mautahsen ya sin sus amigos Arthur y Josek los cuales había fallecidos enfermos en el campo de concentración. La nueva prisión era un lugar donde apenas les daban de comer y donde las cámaras de gas funcionaban sin descanso. En dicho lugar, Simon conoció a Bolek, un teólogo polaco al que le contó lo sucedido en el hospital con el soldado, ya que a Simon le atormentaba el hecho de no haber perdonado al hombre que parecía realmente arrepentido. Los dos hablaron sobre el tema aunque no llegaron a una conclusión pero no obstante, la conversación les recompensó. Cada vez estaba más convencido de que no había actuado de forma correcta con el soldado.

 

     Dos años más tarde, con el fin de la guerra, Simon recupera su libertad y decide visitar a los padres del hombre moribundo y arrepentido. El padre había muerto pero la madre estaba viva y pudo comprobar que era una mujer destrozada, profundamente abatida de dolor por la pérdida de su hijo. Simon sentía lástima de ella por lo que decidió no decirle nada sobre las barbaries contra los judíos cometidas por su hijo durante la guerra. Después de hablar con ella, Simon pudo completar la imagen de Karl, su aspecto físico, como había sido su infancia y sobre todo se había convencido de que era un buen muchacho que había sido adoctrinado para hacer el mal y que en sus últimos días se había dado cuenta y se había arrepentido de ello. Al salir de allí, Simon se preguntó ¿Debería haberlo perdonado?, ¿mi silencio con su madre ha sido correcto? Esa es la cuestión.

 

CRÍTICA A LA OPINIÓN DE HARRY JAMES CARGAS

     Harry James Cargas, erudito y autor estadounidense, mantiene una opinión dura en contra del perdón nazi. Responde a Simon que habría hecho lo mismo que él, ya que piensa que perdonar es cosa de Dios y él no es nadie para situarse por encima de nadie. Piensa que si perdona hace que la persona se sienta en deuda con él.

   En mi opinión, Harry James Cargas tiene gran parte de razón. Leemos en el Evangelio que cuando Jesús perdonaba los pecados, los judíos preguntaban: ¿Quién puede perdonar los pecados sino sólo Dios? Esta pregunta es aplicable al caso planteado. Karl, siendo una persona católica, se sabía los mandamientos, entre ellos "No matarás". Por lo que solo quería ser perdonado por un judio para poder descanzar en paz. No obstante, si haces mal, debes tomar cargo de tus actos y no pedir de forma desesperada un perdón para dar consuelo a tu alma. Además, el perdón de Simon sólo sería un perdón subjetivo ya que él no ha sufrido ese maltrato. Nadie que llegara a entender o conocer lo sucedido se le pasaría por la cabeza perdonar a los nazis todos los crímenes que cometieron. Pienso que solo los que han sufrido y vivido esas torturas tienen derecho a perdonarlos. 

Límites del perdón Isa Martos

RESUMEN LIBRO 


Simon era un judío que fue encarcelado en un campo de concentración en la Alemania nazi y trabajaba en el ferrocarril. También tenía varios amigos, Hosek, que era judío, y Artur, un viejo amigo. 

 Simon nos cuenta cómo los nazis trataban a los judíos y las tristes historias que vivió dentro y fuera del campo. 

 Un día lo enviaron a trabajar al hospital de Lviv. Allí la enfermera lo llevó a una habitación donde estaba un soldado de las SS (Karl). Antes de su muerte, le contó todos los crímenes que había cometido. Luego le pide que lo perdone en nombre de todos los judíos que quería matar y humillar, pero Simon sale de la habitación sin decir una palabra. 

 Volviendo al campo, les cuenta a sus amigos todo lo sucedido y ellos le explican. Al día siguiente, la misma enfermera le informa que Carl está muerto y luego lo lleva a su cuerpo para llevarse todas las posesiones que le prometió excepto el reloj (que va a la madre de Carl). 

 Al cabo de unos años sus amigos ya habían muerto y pasó por varios campos de concentración hasta llegar a Mauthausen. Mientras esperaba su muerte, solo pensaba en Carlos y lo sucedido, pero coincidió con la liberación de los presos, todos fueron liberados y Simon comenzó una vida completamente normal. 

 Finalmente, Simón se acercó a la madre de Carlos para decirle que, a pesar de todos los crímenes, su hijo era una buena persona.


AUTOR 


Mark dice que el perdón lo deben de dar las personas que han sido ofendidas, desafortunadamente no están aquí, por lo que si los muertos no pueden perdonar los vivos tampoco. 

Mark no hubiese perdonado al soldado de la SS por diversas razones: 

La primera es de que hay millones como el soldado moribundo con las mismas ideologías y valores que se enorgullecen de defender a los suyos y hacer todo lo posible por los suyos.

La segunda es que si el soldado moribundo no le hubiese pasado eso en qué se hubiese convertido. 

La tercera es que hubiese pasado si Alemania hubiese ganado la guerra. 

Por lo que Mark dice que él se hubiese quedado para ver como quedaba un nazi menos en el mundo.


MI OPINIÓN 

En mi opinión, mirándolo empaticamente por ambas partes,yo hubiera perdonado al miembro de la SS, ya que, al tener una presión social como tenía él, podemos hacer cosas las cuales en un futuro nos podemos arrepentir. Obviamente es considerado una atrocidad y algo inhumano pero al estar totalmente arrepentido y remordido con lo que hizo, lo hubiera perdonado. 

miércoles, 8 de marzo de 2023

Límites del perdón.

 Resumen del libro.

En este libro, se habla de las cosas que le hacían a los judíos contada desde una persona que vivió todos estos acontecimientos.

Simón, nos cuenta poco a poco su juventud, como fue pasando su vida y como cambió tan de repente, de pasar a ser un arquitecto, a pensar todos los días si ese sería el último. En su vida en los campos de concentraciones nazis, llegó a pensar que "Dios estaba de permiso", ya que esa era la una explicación que podía darle a la situación que estaban viviendo. Un día decidieron trasladarlo a un hospital, que antes era el Instituto Tecnológico donde Simón estudió, allí rápidamente se lo llevo una enfermera a una habitación, dónde se encontraba Karl, que era un soldado nazi de la SS. En la SS, le dijeron a todos esos soldados que las desgracias que les pasaban era culpa de los judíos, que ellos no eran considerados seres humanos y que por esa razón querían eliminarlos daba igual si eran hombre, mujeres o niños.

Karl, le contó a Simón la primera orden que le dieron de atacar una casa llena de judíos, primero pusieron bidones de gasolina, después metieron a todos los judíos dentro y lanzaron las granadas haciendo arder la caso entera, y quién intentase escapar, tenían la orden de matarlo, mataron a muchas personas pero lo que le llamó la atención a Simón fue cuando hablaron de un niño judío llamado Eli, ya que él estaba también en el campo de concentración. Las siguientes semanas destinaron a Karl y a sus compañeros a Taganrog, dónde perdió el conocimiento después de que un autobús explotara, y eso le provocó que perdiera la vista y a partir de ese día lo fueron trasladando de hospital en hospital esperando a que muriera.

Karl, lo que quería conseguir con esto era morir en paz pidiéndole perdón a algún judío por las cosas que había hecho y tanto se arrepentía, pero Simón simplemente salió de la habitación sin decirle nada y volvió con sus compañeros.

Simón estuvo dudando algo de tiempo en si sería correcto contarles a sus amigos todo lo que le había ocurrido, pero al final se decidió porque también quería saber lo que ellos opinaban de la decisión que él había tomado, y seguidamente todos opinaban igual que él, porque la culpa de el sufrimiento que ellos tenían también le pertenecía a Karl.

Al final, cuando ya habían liberado a los judíos que no habían muerto, Simón que era uno de ellos, empezó a buscar información de aquel soldado y acabó encontrando a la madre, que era viuda porque su esposo murió en un bombardeo en una fabrica y solo le quedaba el recuerdo de su marido y la idea del hijo ejemplar que tuvo y que murió en la guerra. Simón decidió no contarle nada a su madre, no quería que su dolor creciera, así que prefirió dejar las cosas como estaban.

Aunque el tiempo iba pasando, Simón siempre se quedo con la duda de que si su respuesta a ese soldado había sido buena o lo debería de haber perdonado.

Resumen de un autor.

Harry James Cargas, dice que el perdón es algo que tenemos que ganárnoslo, no solo pensar en el en nuestro lecho de muerte, ya que es una gran virtud. Dice que él no perdonaría a Karl, que solamente Dios decide si perdonarlo o no. También habla sobre la existencia de unos crímenes los cuales son imperdonables, y esos sin ninguna duda fueron los que cometieron Hitler y sus secuaces.

Crítica del autor.

Pienso, que el autor tiene razón cuando dice que son unos crímenes imperdonables, que lo que les hacían a los judíos no eran actos de personas, si no de animales. Pero hay que tener también en cuenta, que ellos estaban sometidos por las órdenes de sus superiores y que si desobedecían podrían hasta morir ellos mismos, hay que pensar también que si te pusieras en la situación de Karl en aquellos tiempos, te salvarías a ti mismo para que no terminen matándote.

Mi opinión.

Yo pienso, que acabaría perdonando a Karl, porque al final él se preocupo por ser perdonado y poder morir en paz, como he dicho antes, hay que ponerse también en su situación, simplemente fue un acto de supervivencia, los cuales él no estaba de acuerdo pero tenía que hacerlo si quería seguir vivo. 

Sé que el perdón es algo que no se puede dar a cualquier persona, porque muchas de las personas que te piden perdón, al final no se arrepienten de sus acciones , pero Karl demostró estar arrepentido. Además, fue sincero con Simón y le contó toda su historia sin ninguna mentira.

LOS LIMITES DEL PERDON DAVID ATENCIANO CALDERON

 RESUMEN DEL LIBRO

Los limites del perdon cuenta la historia de nazis y un campo de concentracion de judios, estos trabajaban en las vias ferroviarias y vivian en pesimas condiciones y auquellos judios que no servian para trabajar eran enviados a las camaras de gas para exterminarlos.

Simon Wiesenthal, es el protagista de esta historia, era judio y trabajaba en el campo de concentracion, Simon estudio para obtener el titulo de arquitecto, pero lo reformaron en hospital para nazis. Cuando hacia el hospital se encontro un cementerio con tumbas y un girasol en cada una de ellas, era un cementerio de aquellos soldados de la SS que habian fallecido durante las guerras.

Simon fue destinado a trabajar al hospital para cuidar a los heridos, y le toco cuidar a un soldado de la SS llamado karl un tanto joven de unos 21 años. este se encontraba muy arrepentido, y le confiesa al judio una serie de crimenes que estaba obligado a realizar, los cuales le estaban atormentando.

Karl le confiesa a Simon que tras estar en Rusia se encontraron afamilias judias la mayoria de estos eran ancianos, niños y mujeres. Estas familias murieron debido a que los nazis los mataron echandoles gasolina a la casa donde se encontraban estas familias y arrojandoles granadas. Simon al escuvhar esto se intento marchar pero Karl le suplico qaue no lo hiciera que aun tenia que contarle mas cosas. Simon asi lo hizo, se quedo escuchando a Karl y sus horribles historias las cuales tanto le atormentaba y se arrepentia de ellas.

Karl le conto que niños de familias judias fueron recogidos por la SS y los llevaron a las camaras de gas. En el barrio de Crimea durante la guerra encontraron a una familia de judios y empezaron a disparar pero Karl se quedo detenido de el cayo un obus, cuando este quiso abrir los ojos se encontraba en el hospital con su cuerpo reventado y ciego.

Karl queria morir en paz por lo que le conto todo lo que habia hecho a un judio, para Karl esto fue demasiado espantoso ya que estaba condicionado por la sociedad y tambien le atormentaba la idea de no obtener un girasol el dia de su muerte, debido a todos los crimenes que habia cometido.

Simon fue al campo de concentracion y le conto todo lo sucedido a otros judios, al dia siguiente Simon se dirigio al hospital pero Karl habia muerto.

El nazi habia dejado sus pertenencias pero Simon no las acepto. Años mas tarde Simon se acordo de karl y fue a ver a la madre de este para ver si los hechos de este soldado pudieron ser perdonados, finalmente Karl fue perdonado en secreto.

OPINION PERSONAL DEL LIBRO

Este libro me ha resultado un tanto interesante ya que hay un debate etico y moral que deja mucho que desear, es un libro basado en los errores de una persona condicionada por la sociedad y el hecho de ser perdonada o no, por tales motivos tan horribles, El final me ha resultado un tanto intrigante ya que deja en suspense si es perdonado realmente o si lo es porque le que a Simon le da pena Karl.

OPINION AUTOR (EVA FLEISCHNER)

Eva si perdonaria a los nazis, ya que ella opina que salvo los crimenes que ha causado Karl, y todas esas victimas que han resultado heridas y muertas por los soldados de la SS, aun asi Simon por propia voluntad decide quedarse y escuchar a karl, aunque Simon estuviera obligado a cuidarlo.

Simon le contesta a su deseo de ser perdonado una y otra vez ya que Simon tolero que pese ca todo lo ocurrido y el odio que le supone todos estos asesinatos, le permite escucharlo, estar con el, cogerle de la mano... Y el simple hecho de que años despues de la muerte de Karl, Simon vaya a visitar a su familia y la inquieta duda que tiene Simon por haber complacido los deseos de perdon de este soldado. Para Eva la pregunta no es lo perdonaria o no, sino si pudiera haberlo perdonado.

OPINION PERSONAL

Mi opinion personal es facil y directa,  no perdonaria al soldado por sus crimenes y muertes de tantas personas inocentes asi como de niños, ancianos, mujeres, hombres... Por todo el dolor de tantas familias que supone la perdida tan grande de sus seres queridos y tantas vidas destruidas.