viernes, 25 de febrero de 2011

Los límites del perdón (Carla Capuz)

Resumen:
Simon nos muestra la realidad que había en los campos de concentración y a las torturas que eran sometidos. Al llevarlo a un hospital, un enfermo alemán decide confesarle todo el daño que ha hecho ya que este quiere el perdón para poder morir tranquilo. Simon decide irse sin decirle nada, más tarde este es liberado del campo de concentración y muestra un pensamiento de arrepentimiento por haberse ido sin darle su perdón.

Postura de sus compañeros:
-Arthur: era un antiguo gran amigo, esta cansado de su situación y lo único que desea es que acabe todo por lo que están pasando.
-Josek: hombre creyente, casi siempre discutían con él debido a que lo sabía todo justificándolo con la religión.
-Bolek: era un hombre del que todos estaban sorprendidos ya que parecía no afectarle nada de lo que estaba ocurriendo a su alrededor, al contrario que a sus compañeros.

Opinión personal:
Creo que Simon se enfrenta a una situación en la que a nadie le gustaría estar, en la cual tienes que perdonar a una persona que lo único que sabes es que es un asesino en serie y que incluso a podido matar a alguien de tu familia o cercano a ti. Por lo tanto para no darle el perdón y sentirse culpable por haber perdonado a un asesino decide huir y acabar con el sufrimiento que eso le produce.
En mi opinión, probablemente yo no habría actuado de la misma manera que lo hizo Simon, no habría huido. No solo no le habría dado el perdón que tanto quería sino que le habría dado a conocer mis vivencias en el campo de concentración para que de verdad supiera lo que se vive allí dentro y además tuviera un mayor sentimiento de culpabilidad y realmente se diera cuenta del mal que estaban haciendo. También, si le hubiera perdonado, sé que tampoco llegaría a tener un sentimiento de tranquilidad ya que sabía que estaba haciendo daño a otras personas e incluso me repercutía a mí mismo. Además, si le hubiera perdonado tampoco habría estado mucho mas tranquila ya que todo el mundo podemos aceptar un perdón pero por mucho que lo intentemos no vamos a olvidar porque lo hemos dado. Tampoco creo que lo correcto sea pedir perdón en tus últimos momentos de vida porque al fin y al cabo el mal ya lo has hecho.

EL CARDENAL FRANZ KÖING:
Biografía del autor: ejerció como arzobispo de Viena hasta que en el año 1958 le nombraron cardenal. Teólogo y erudito, es autor de The Bibble in View of the World History y de la obra en tres volúmenes Christus und die Religiones der Erde.

Opinión del autor sobre el dilema:
La opinión del Cardenal Franz Köing es la siguiente, y es que el piensa que el moribundo a un tenía fe, a un creía en Dios y por ese motivo decidió “confesarle” a Simon (un judío) la gran masacre que realizó hacia los judíos. A pesar de que Simon se marchó sin pronunciar palabra alguna, el moribundo entendió que aceptó el perdón puesto que este más tarde le cedió todas sus pertenencias. De haber pensado que no lo había aceptado no le habría dejado nada. También cita la oportunidad que Simon tuvo en un mundo lleno de pobreza, guerras… y no lo hizo, y probablemente esto es lo que todavía le atormenta y le producen esas dudas de si hizo bien o mal al marcharse.

Opinión personal sobre el Cardenal Franz Köing:
En cuando a el autor, yo pienso que si que creía en Dios y tenía fe, aunque bajo mi punto de vista se acordó algo tarde de la existencia de Dios y de la fe, puesto que Dios no te dice que mates, que hagas daño a la gente, que les hagas sufrir…si no todo lo contrario, que ayudes siempre que puedas a todos, que no hagas feliz a todo aquel que puedas… y el hizo todo lo contrario a lo que Dios dice. Por lo tanto yo creo que tenía un gran cargo de conciencia y puesto que quería descansar en paz decidió confesarle a alguien que estaba sufriendo en algo que él había contribuido. Necesitaba contárselo para que se diera cuenta del mal que había hecho a su gente e intentar que este le diera su perdón para a si estar en paz con los judíos y con Dios.
Respecto a que tuvo una gran oportunidad en mundo como el de entonces tiene razón y es que no todos lo tenían. Pero lo que yo creo es que al fin y al cabo Simon no era mala persona y le vio al enfermo tan mal que no quiso decirle nada porque si no probablemente le habría hecho más daño por lo que decidió marcharse dejando en entre dicho si se lo dio o no.

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